Artista y escultor monumental, Juan Garaizábal (Madrid, 1951) entiende el arte como un viaje de exploración cuyo resultado debe despertar fascinación. Con obras expuestas por todo el mundo, como Francia, Estados Unidos, Rumanía o Italia, este año ha participado en ARCO con una escultura masiva dentro de la muestra ‘Tienen madera’. Un divertido juego de palabras con la madera como protagonista de la exposición y talento de los artistas.
En su obra, cuya presencia en ARCO adquiere un protagonismo indiscutible dado su gran formato, Garaizábal crea una estructura que remite a los barriles de vino propios de la actividad bodeguera. A partir de las cualidades propias de la madera, como son geometría, tacto y calidez, el artista se deja llevar y compone una masa de maderas que producen ese efecto masivo de vaso; con los troncos cortados en cuadrado de manera modular, casi matricial, y trabajando directamente sobre ellos con una motosierra. La obra resultante es la primera de su género, tanto por los materiales, la escala y la forma en la que ha sido creada.
En la era de mayor innovación, la madera vive su mejor momento. Entiende las claves.